Observo para luego escribir, sin nombres, solo historias contadas por si acaso.

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Las personas sencillas son simplemente personas hermosas.

Esto va dedicado a una amiga que es asi, muy sencilla, la he ido conociendo poco a poco y cada vez me sorprende su manera de ser.

 El fin de semana conversé con una amiga, y me comentó que siempre lee lo que escribo, que a veces quizás muchas personas no entienden los temas, pero que ella siempre sacaba una enseñanza de los mismos.

Le digo, pues ya con una persona que saque provecho de lo que escribo, me siento realizada.

 Ahora el tema es hablar de la sencillez, de esas hermosas personas que poseen esa gran cualidad, innegable, inmensa, personas que cuando llegan a nuestras vidas, es una bendición, porque los días se te hacen especiales, no te sometes a presiones innecesarias.

Los amigos son variados, personalidad distintas, es una mezcla de emociones, de historias, de reacciones, nada es perfecto, nada es igual, y por eso, la variedad le da a la vida ese toque de locura, pero debemos saber cuando ese toquecito de locura no te prive de la tranquilidad, de tu paz interna y que las cosas fluyan con la verdad por delante.

Mientras más sencilla es la gente, más hermosa resulta, no necesita de accesorios caros, ni de tener las mejores cosas, no necesita presumir lo que tiene y tantas veces hasta lo que no tiene, no anda presumiendo perfección, le da lo mismo tener todas las imperfecciones y se muestra tal como es.

 La sencillez hace de una persona común, una persona excepcional, la hace grande, ahora bien, ¿cuantos seres atropellan a personas que llegan a su vida, las utilizan, las subestiman?, las hieren por el simple hecho de saciar sus propias necesidades a costa de ellas.
 Yo amo a las personas sencillas y Dios me ha puesto seres así a mi lado, con quienes mis días se llenan de luz, de fuerza, de confianza, que sin importar que por momentos tropiece por el egoísmo malsano de almas rotas, tengo esos brazos que sé, me reciben con amor, creyendo en lo que soy, aceptando mis locuras.

Y he aprendido que en la sencillez está el secreto de lo verdaderamente grande que puede ser una amiga.

 El dinero hace personas ricas
El conocimiento hacer personas sabias
Pero la humildad hace grandes personas.

 MárquezdeHerrera 2015

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